La parte más alta del Somontano, en Huesca, dispone de privilegiados suelos calcáreos.
¿Qué tiene de peculiar este terreno? Pues un doble efecto: cuando llueve, actuar como una esponja, dejando filtrar el agua para que permanezca estancada en el subsuelo, y así, al llegar la estación estival, más seca, el suelo se cierre e impida que el agua se evapore.
¿Qué prefiere la vid? Pues terrenos profundos e inclinados, que favorezcan la aireación y la insolación, donde enraizarse bien y obtener todos los nutrientes que necesita para su crecimiento.
¿Y podemos decir que el clima semihúmedo es otro aliado de Bodegas Obergo? Teniendo presente que la zona alta de la D.O. Somontano se diferencia por sus inviernos fríos y sus veranos suaves, con lluvias abundantes y numerosas horas de sol a lo largo del año, sin lugar a dudas el clima ayuda a la excelente maduración de la uva, y a incidir en la calidad de nuestros caldos.
¿A qué te apetecería comprobarlo y caminar entre nuestros viñedos?.
